domingo, 28 de septiembre de 2014

Ronaldo ¿ha salido del armario?.

    Hoy lo he visto, no me sorprende; a todo cerdo le llega su San Martín y Ronaldo no iba a ser menos.
    Al bicho le gusta la pulga, está enamorado.
    Si la pulga marca un gol o dos, el marca tres, y no es por envidia, es por el enamoramiento, porque eso hacen aquellos enamorados que lo están hasta las trancas, la obsesión hacia la dedicación, les gusta dedicar a su amor todo lo más y mejor posible.
    A los metro-sexuales es lo que les pasa normalmente, mucho músculo y poco cerebro, y el poco que tienen solo lo utilizan para el sexo.
    Pero el bicho se ha enamorado de la pulga, y eso no es sexo, eso es amor.
    Llevamos cuatro años viendo ese acercamiento, en las entrega de premios la pulga se viste como un semáforo, y  eso, al bicho, al final le ha puesto caliente.
    Por eso critico esa presunta falsedad; tanto hetero, cuando a lo mejor son homo o bi.
    La vida es así, se es o no se es, ese es el dilema.
    Ya veremos como termina esto.
    A lo mejor el próximo partido el bicho se pone el traje fucsia.

R. el C.

viernes, 26 de septiembre de 2014

Los linieres no le gustan a Ronaldo


    Pues sí, al señorito no le gustan.
    No le gustan, por que al señorito le molesta que cuando corre la banda le siga un individuo con un banderín, que algunas veces levanta, impidiéndole seguir corriendo.
    Que jodienda, correr para nada, sin poder marcar un gol, sin poder enseñar esa tableta de chocolate mantecado, el bello ombligo, vamos,    el cuerpo que le dio Dios.
     Los linieres sobran en el fútbol.
    En los demás deportes no los hay.
    Fuera los linieres.